sábado, 27 de abril de 2013

Aniversario de la Muerte de O´Sensei...

     Un día como el de ayer hace ya 44 años fallecía O´ SENSEI MORIHEI UESHIBA, un hombre adelantado a su tiempo y creador del AIKIDO. Lo escribo con mayúsculas, que es como se escriben las cosas importantes para que resalten más.

     Gracias a él muchos de los que practicamos el arte que él creó intentamos ser, qué narices, somos mejores personas; y no es prepotencia es la realidad. Llevamos este arte marcial, por que es lo que és el Aikido, por si alguien no se ha dado cuenta todavía; a nuestra vida cotidiana ó por lo menos lo intentamos. Desde mi humilde opinión creo que eso es lo más difícil del Aikido. Que las técnicas son complicadas... se entrena más duro y al final salen, que las caídas no termino de pillarlas... se practican más veces y salen, pero y aplicar el Aikido en nuestra forma de ser y en nuestro día a día... Pués también sale, si ponemos empeño e intentamos aplicarlo en todas nuestras acciones también sale.

Así que para mí yo creo que este Tesoro llamado Aikido y que este hombre tan magnifico que se esforzó tanto en dejarnos este legado, deberíamos disfrutarlo y presentárselo a todo el mundo para que ellos también puedan disfrutarlo.

En Aikido Talavera en la clase de ayer, todo el mundo motivado, todo el mundo involucrado, todo el mundo dándolo todo... La verdad fué una pasada de clase. Agradecer a compañeros y alumnos el respeto e interés que se toman y lo mucho que me están enseñando ellos a mí.

No se pudo hacer mejor homenaje a O,Sensei en el día de ayer que una buena clase de Aikido...

lunes, 22 de abril de 2013

"Cuentos Chinos..."

Las Puertas del Paraíso...

     Un samurai se presentó delante del Maestro Zen Hakuin y le preguntó:

     - ¿Existen realmente el infierno y el paraíso?
     - ¿Quién eres tú? - Preguntó el Maestro.
     - Soy el samurai . . .
     - ¡Tú! ¿Un guerrero? - exclamó Hakuin. Pero mírate bien ¿qué señor va a quererte a su servicio? Pareces un mendigo.

     La cólera se apoderó del samurai. Aferró su sable y lo desenvainó...

     - Hakuin continuó - ¡Ah, incluso tienes un sable! Pero seguramente eres demasiado torpe para cortarme la cabeza con él.

     Fuera de sí, el samurai levantó su sable dispuesto a golpear al Maestro. En ese momento este le dijo:

     - Aquí se abren las puertas del infierno.

     Sorprendido por la seguridad tranquila del monje, el samurai envainó el sable y se inclinó respetuosamente.

     - Aquí se abren las puertas del paraíso.

Publicado: El lado oscuro del Aikido...

Ueshiba y el adversario...

     Pablo Coelho, escritor brasileño de fama universal, practicaba Aikido y ha publicado algunos artículos sobre este arte marcial:

     Creado por el japonés Morihei Ueshiba (1883 - 1969), el aikido es el único arte marcial que practiqué y, para mí, uno de los más interesantes. El año pasado publiqué algunos textos de Ueshiba, recogidos por sus discípulos durante sus conversaciones. Este año, quiero desarrollar libremente algunas de sus ideas respecto a las confrontaciones por las que tenemos que pasar:

     A) El que tiene un objetivo en la vida se enfrentará a una fuerza opuesta; para eliminar esa fuerza, es necesario aprender a hacerla trabajar en su favor.

     B) Un verdadero guerrero jamás sacrifica a sus amigos para derrotar al adversario; por lo tanto tiene que aprender a detectar y resolver los problemas antes de que ellos se manifiesten.

     C) La mejor manera de enfrentarse con el adversario es convencerlo de la inutilidad de sus gestos. El guerrero muestra que su objetivo no es destruir nada, sino construir su propia vida. Quien camina en dirección hacia su sueño busca la armonía y la comprensión antes que cualquier otra cosa, y no le importa explicar mil veces lo que desea hasta llegar a ser atendido.

     D) No te quedes contemplando todo el tiempo los problemas que hay en tú camino, por que terminarán por hipnotizarte, impidiéndote cualquier acción. Tampoco permanezcas excesivamente concentrado en tus propias cualidades, pues fueran hechas para ser usadas, no exhibidas.

     E) La fuerza de un hombre no reside en el coraje para atacar, sino en la capacidad para resistir los ataques. Así, pués, prepárate - a través de la meditación, ejercicios y una profunda conciencia de tus propósitos - para aguantar con firmeza y continuar en el camino, aunque todos a tu alrededor procuren alejarte de tu meta.

     F) La derrota ocurre antes que la victoria. La clave para ganar es saber perder, pero no desistir.

     G) En situaciones extremas, principalmente cuando ya estás cerca de tu objetivo, el universo pondrá a prueba tus propósitos, exigiéndote el máximo de tú energía. Tienes que estar preparado para afrontar las grandes pruebas, a medida que tu sueño se hace realidad.

     H) No contemples tu vida con resentimiento, y prepárate para aceptar todo aquello que los dioses te ofrecieron; cada día trae en sí alegría y furia, dolor y placer, oscuridad y luz, crecimiento y decadencia. Todo forma parte del ciclo de la naturaleza, por lo tanto, no intentes protestar ni luchar contra el orden cósmico. Acéptalo y él te aceptará.

     I) Si tu corazón es suficientemente grande, será capaz de acoger a todos aquellos que se oponen a su destino; y una vez tú los hayas acogido con amor, será capaz de anular la fuerza negativa que sus adversarios traían.

     J) Cuando percibas que un adversario se aproxima, adelántate y háblale con palabras delicadas. Si él insiste en su agresividad, no aceptes la lucha a no ser que te ofrezca algo positivo; en este caso, utiliza la fuerza de tu oponente y no gastes tu energía.

     K) Conoce el momento correcto de usar cada una de las cuatro cualidades que la naturaleza nos enseña. Según las circunstancias, debes ser duro como un diamante, flexible como una pluma, generoso como el agua o vacío como el aire. Si el origen de tu problema es el fuego, no sirve de nada contraatacar con más fuego, porque eso sólo aumentará el incendio; en ese caso, solamente el agua será capaz de combatir el mal. Nunca el problema puede enseñarte cómo reaccionar ante él: solo tú tienes el poder para eso.

Fuente: EL SEMANAL del 6 de Julio del 2003
Extraído: Aikido Sevilla

 

miércoles, 17 de abril de 2013

Aikido Fudoshin

     Hace cientos de años los monjes Zen, meditando según las enseñanzas de Buda, constataron que podían liberarse de los apegos causantes de sufrimiento y de muchos problemas, manteniendo al mismo tiempo un estado de ánimo ecuánime y resistente a las influencias externas, al que dieron el nombre de Fudoshin refiriéndose a la facultad de conservar la estabilidad emocional, el control de la mente y el ánimo imperturbable ante cualquier circunstancia de dificultad, conflicto o peligro.


     Takuan Soho lo explicaba así:
     "Mantenerse tranquilo cuando todo está en calma, no es la verdadera serenidad, conservar la tranquilidad en medio de la acción más adversa, o amenazadora, esa es la auténtica serenidad".

     En el lenguaje coloquial español, y salvando las distancias, podría equipararse a la expresión "poner cara de póker" pues de hecho el jugador adopta una e     Esta forma de comportamiento una vez conocida y puesta a prueba, fue adoptada por los samurais, cuyo rango social les obligaba a no exteriorizar su estado de ánimo ni sus emociones, y además Fudoshin constituía un valioso recurso como estrategia en el combate, para permanecer en calma y alerta máxima frente al peligro, sin dejarse perturbar por ningún factor externo, ni regaño o provocación del adversario.

     El samurai en combate individual a muerte, podía hacerse una idea bastante acertada de la preparación y competencias de su enemigo solamente observando si poseía Fudoshin o carecía del mismo. Mostrarse sereno, impasible y decidido, sin miedo al peligro, era la cualidad que causaba mayor impresión de temor, respeto y desconcierto en el contrincante, hasta el punto que, a veces el más débil se declaraba perdedor antes de comenzar el combate.

     Fudoshin es por tanto el resultado de cultivar una actitud de serenidad inalterable que no se deja influenciar ni distraer por las dificultades, las amenazas, los conflictos, el peligro posible o real, sea cual sea su naturaleza, pero no implica pasividad ni indiferencia, todo lo contrario, se es receptivo a todos los mensajes que llegan por diferentes canales mientras se procesa el modo de dar la mejor respuesta.
expresión facial y corporal inescrutable e imperturbable, con el fin de no manifestar ninguna emoción ni señal que dé pistas al adversario, respecto de lo que tiene o no tiene, y de lo que quiere hacer.

     En la vida ordinaria la impasibilidad inteligente equivale a disponer de un valioso recurso que impide que los otros puedan intuir o adivinar los pensamientos, las emociones, los objetivos, etc., hasta que explicita y voluntariamente se pongan de manifiesto según convenga a los propios planes, con el valor añadido de no dejarse influenciar por ninguna acción ni propuesta ajena si no es acorde con el objetivo que se persigue. El aikidoka, en su quehacer diario, encuentra muchos imponderables, cuando no personas que obstaculizan su gestión o quieren aprovecharse de ella, por lo que la actitud Fudoshin le será de gran utilizad, no para engañar a nadie sino para no ser engañado, y sobre todo para inspirar confianza.

     Al igual que el samurai al amanecer del día señalado, montaba en su caballo y se disponía a unirse a los suyos para la batalla, el aikidoka al salir de su casa debe adoptar la actitud Fudoshin para enfrentarse a las tareas del día con una disposición de serenidad inalterable ante lo fácil, lo difícil, lo imprevisto o lo no deseado.

     En el ámbito de las relaciones interpersonales, aquel cuyo temperamento y reacciones son conocidas y previsibles, estará siempre en desventaja, respecto del interlocutor que sepa controlar sus pensamientos, sus impulsos y sus emociones.

     El objetivo de la imperturbabilidad va más allá del propósito de ocultar el mundo interior al oponente, para alcanzar todos los momentos y vivencias de cada día sobre todo los de incertidumbre, las presiones de los otros, la tensión emocional que puede haber en cada acto, y si bien no está al alcance del aikidoka controlar los factores externos, siempre podrá elegir la actitud de lucidez y autocontrol que le eviten tomar decisiones o comportamientos equivocados.

     Vista la naturaleza de este recurso y su conveniencia en el quehacer cotidiano, la cuestión es saber cómo se puede adquirir. ¿Cómo se aprende...? ¿Qué entrenamiento seguir para lograr este control...?

     En un monasterio Zen, el discípulo le pregunta al maestro:
     - Maestro, ¿cómo puedo llegar a controlar mi espíritu...?
     El maestro le responde:
     - Trata de ser consciente de todos los momentos en los que te disgustas y pierdes la calma durante el día.

     Los principios del Zen, del mismo modo que los del Budo, recuerdan a los practicantes la necesidad de adiestrarse en el dominio de sí mismo en cualquier situación, un aprendizaje de gran utilidad en todos los tiempos y sobre todo en la actualidad, enseñanza que hoy se aborda desde los conocimientos de la inteligencia emocional y la terapia cognitiva conductual.

INTELIGENCIA EMOCIONAL

     Las pautas señaladas en la década de los 90 por lo expertos en inteligencia emocional como Daniel Goleman, Mayer, Salovey, Schutte, etc., se refieren entre otras cosas, a la forma de interactuar  con el mundo, sabiendo mantener el equilibrio psicosomático que permite salir airoso de situaciones difíciles, sin dañarse ni dañar a los demás, es decir aprender a "gestionar" las emociones del mejor modo, y hasta donde sea posible armonizarlas con la razón.  Gestionar o controlar las emociones, no quiere decir sofocarlas o reprimirlas, sino permitir que afloren, sin que nos gobiernen.

     Nuestro estado de ánimo influye en los demás y viceversa, para bien o para mal, tanto que podría decirse que las "emociones se contagian" y resultan ser un método de comunicación muy eficaz y directo. Respecto a ejercer un control psicofisiológico sobre las reacciones del sistema nervioso autónomo, una respuesta válida podría ser la que expone la investigadora Frances Vaughnan en el libro "El arco interno".

     "Esta habilidad no se domina a fuerza de voluntad, ni por medio del esfuerzo consciente, sino que es más fácil de aprender en un estado de "volición pasiva", en el que se comienza observando primero los cambios que se han producido y permitiéndolos después. La práctica de la autorregulación fisiológica, nos demuestra que cuanto más intentamos cambiar algo por la voluntad directa menos se consigue. Si por el contrario, dejamos de intentarlo y adoptamos una actitud más permisiva, que permita que fenómeno tenga lugar, parece suceder con más facilidad".

     Ante una taquicardia producida por una excitación nerviosa, no dará resultado el ordenar directamente al corazón que se ralentice, antes bien hay que permitir y sentir esa aceleración, y desde esa sencación consciente persuadirse que todo iría mejor si este órgano "quisiera tranquilizarse" y volver a su frecuencia normal.

¿SE PUEDE ADQUIRIR LA SERENIDAD?

     Ante tantos factores que pueden alterar el estado de calma, ¿es posible conservar la serenidad? ¿Cómo?. La psicología nos confirma que los pensamientos crean realidades, y que para el cerebro humano, lo imaginado y lo real desencadenan reacciones semejantes, y también que a través del gesto corporal se pueden modificar el sentimiento interno.

     Los descubrimientos en Neuropsicobiología han revelado que los circuitos neuronales y los transmisores químicos que los activan pueden ser modificados en cualquier etapa de la vida, cambiando la forma de reaccionar habitual frente a un estimulo determinado, sustituyendo las respuestas viscerales impulsivas por otras más racionales y manteniendo esa forma de actuar en el tiempo.

     Desde antiguo se ha dicho que: producir"Si deseas adquirir una cualidad imítala en tu comportamiento, y se producirá el milagro", sentencia que se ve confirmada por los descubrimientos citados. La mayoría de las personas admiran a los que proceden con serenidad en situaciones complicadas, y desearían apropiarse de ese saber estar y proceder, pero desafortunadamente no la tienen, y lo que es peor, creen que nunca la podrán tener porque no saben como lograrla...

     Sin embargo el secreto es tan simple como viejo, y como creo en él, me permito resumirlo para el lector en unas frases sencillas y milagrosas:

     "Si quieres tener serenidad, compórtate con serenidad".
     "Si quieres tener valor actúa como se lo tuvieras".
     "Si quieres superar el miedo, obra como si no lo conocieras"

     En todos los tiempos y culturas, las cualidades personales sólo pueden adquirirse mediante el esfuerzo personal mantenido en el tiempo, y adquirir el dominio de la serenidad permanente e inalterable para inexcusablemente por este camino, en el que no hay atajos, aunque sí pistas orientativas, como por ejemplo:

     Considerar todos los encuentros difíciles o complicados de cada día como la mejor ocasión para ejercitar Fudoshin.

     Habituarse a percibir la situación de manera global, así como la interpretación de lo que se dice o se calla, y por qué lo uno o lo otro, y las consecuencias posibles, sin quedarse atado a lo ambiguo, lo artificial, lo sospechoso o lo adverso.

     El entrenamiento contempla también el dominio de: los pensamientos, las emociones y los sentimientos, la respiración y el tono muscular, las posturas corporales y la expresión facial, las buenas maneras mediante la cortesía y el respeto.

     Estas sencillas pautas descritas, puestas en práctica día a día, pueden ser suficientes para entrar a voluntad en la actitud Fudoshin, cuando sea necesario o conveniente.

Revista Budoka
José Santos Nalda Albiac
5º Dan Aikido - 1º Dan Judo

   

lunes, 15 de abril de 2013

Los Cuatro Principios . . .

     O´Sensei Morihei Ueshiba, practicó varias Artes Marciales, y de cada una de ellos absorbió diferentes aspectos que añadió al Aiki-Budo. A lo largo de sus enseñanzas, O´Sensei Ueshiba estudió el Ki, la energía de la vida, y lo usó para desarrollar su Arte. A través del uso del Ki, desarrolló técnicas que asombraron a sus alumnos. Sin embargo, este Gran Maestro explicó lo que hacían a todos aquellos estudiantes que se encontraban "embrujados" por su magia. Su habilidad surgió de su iluminación, y lo más probables, es que esto fuera imposible de transmitirse. Por ejemplo, después de vencer a un Maestro de Kendo, gracias a los conocimientos que poseída de ante mano de todos los ataques de éste, fue a lavarse a un pozo donde M. Ueshiba contó que sintió una "serenidad de mente y espíritu" mientras se lavaba, fue como si "le echaran una luz de oro sobre su cabeza". No cabe la menor duda, de que esta iluminación fue difícil de describir hasta para O`Sensei.

     Después de su muerte, todos intentaron imitar su técnica y seguir sus enseñanzas filosóficas. Al menos, ese era el objetivo, aunque no lograron mucho éxito. Fue en este momento, cuando el Aikido comenzó a sufrir algunos cambios, el resultado fue una variopinta diversidad de escuelas. Algunos pensaban que eran las técnicas "las que hacían" el Arte, otros creían que el desarrollo del Ki era lo primordial y otros pensaban que la unión del cuerpo y la mente era lo más importante de O`Sensei.

     El abanderado de esta última escuela era el instructor Koichi Tohei, que había sido estudiante de O`Sensei durante muchos años y que públicamente ha reconocido los cambios evolutivos de su interpretación del Arte. Tohei era muy sensible sobre la pérdida de los conceptos del Ki. El Ki había sido una parte importante del entrenamiento de Tohei, y estaba convencido de que este entrenamiento le había ayudado inmensamente.

     A través de sus experiencias a lo largo de su vida y en su entrenamiento, que incluía haber servido durante la II Guerra Mundial, Koichi Tohei desarrolló lo que denominó "los cuatro principios de unificación de la mente y el cuerpo". Estos son:

     1) Concentrarse en el punto
     Este principio se inspiró en un proverbio japonés que dice:
     "Coloca tu fuerza en la parte inferior del abdomen". Tohei descubrió que concentrar toda la fuerza en la parte inferior del abdomen le provocaba cansancio e inquietud, y que a su vez este método le infundía un cierto miedo. Tohei, modificó el dicho y se concentró en un punto muy pequeño de su abdomen, el cambio le ayudó a sentirse más fuerte tanto física como mentalmente.

     2) Relajarse completamente (la relajación controlada)
     Después de su primera batalla en la II Guerra Mundial, Tohei se cuestionó su futuro y su destino. Encontró difícil de creer que "poderes superiores" le habían entrenado durante tanto tiempo sin ningún propósito. Decidió dejar la cuestión de si viviría o no, en manos de los poderes del Universo. Esta decisión le permitió relajarse completamente y concentrarse en el presente. Tohei, por tanto fue capaz de recuperar su serenidad, incluso bajo el ataque del enemigo. Muchas personas relacionan la relajación con la debilidad, cuando es exactamente todo lo contrario. La tensión, no sólamente dificulta el movimiento sino que el consumo de energía es mucho mayor, produciendo más fatiga para la mente y el cuerpo.

     3) Dejar asentar el peso en su sitio
     El dejar que el peso se asiente de forma correcta en el punto natural de cada miembro, permite que el cuerpo se mueva sin tensión y sin esfuerzo. Cuando asientas el peso, el cuerpo y la mente puedes moverde de forma más relajada. Esto supone una posición fuerte, ya que no se pierde inútilmente ninguna energía los movimientos que podrían resultar peligrosos o problemáticos.

     4) Proyectar el Ki (dejar que el Ki fluya)
     Este principio lo descubrió Tohei cuando aún era un niño. Estuvo enfermo y le aconsejaron que no hablara en voz alta. Sin embargo, se dio cuenta que cuando hablaba en un tono muy bajo era capaz de atraer hacia dentro su Ki, lo cual le hacía más débil. Fue entonces, cuando se dio cuenta de lo beneficioso que era proyectar el Ki, incluso llegó a afirmar que durante la guerra las balas débiles eran incapaces de hacer daño a un Ki fuerte. Esta creencia, dijo él,  le ayudó a mantener a sus compañeros de armas vivos. Ya que el Ki es la energía del Universo, podemos usarla para fortalecer y curar a los enfermos.

     Aunque Tohei dio estos cuatro principios en este mismo orden, descubriendo uno solo, se puede llegar hasta los otros tres si se sigue una progresión natural. Lo mismo ocurre si se pierde uno de ellos, al perderse uno, se pierden todos. Los cuatro están interrelaccionados.

     Cuando Tohei notó que el Ki estaba desapareciendo de los entrenamientos después de la muerte del Maestro Ueshiba, creó una clase para el desarrollo del Ki basándose en estos cuatro principios de la unificación de la mente y el cuerpo. Aunque no le estaba permitido dar estas enseñanzas en la Central de la Aikikai de Tokyo, sí se le permitía enseñar esta clase de Ki en otras salas de entrenamiento.

     Tohei terminando creando la "Sociedad Internacional de Ki" y sus clases sobre el desarrollo del Ki aumentaron notablemente en 1971. En 1974, sin embargo miembros del Dojo Hombu contactaron con practicantes de los Estados Unidos para informarles que Tohei estaba enseñando en América, ya no era bien visto en el "cuartel general" del Aikido. Aunque Tohei había dedicado toda su vida al crecimiento y el desarrollo de la organización, abandonó el Dojo Hombu sin nada que acreditara sus años de dedicación. Poco después, Tohei fundó el Shin Shin Toitsu Aikido, un sistema basado en los cuatro principios de la unificación del cuerpo con la mente.

     Sensei Tohei no sólo aplicó los cuatro principios de unificación a la técnica del Aikido sino que enseñaba como aplicarlos a la vida cotidiana. El estudio de los cuatro principios engrandeció el desarrollo personal y el entendimiento de la técnica de sus alumnos.

     Roderick Kobayashi, uno de los mejores alumnos de Tohei, también pensó como aplicar los cuatro principios a la vida cotidiana. Kobayashi, buscó formas bajo la guía de su Maestro para desarrollas y refinar el Seidokan Aikido. El principal objetivo de la Seidokan es seguir los principios del Aikido, que son la circularidad del movimiento, la totalidad, el uso correcto del Ki, el control del primer movimiento, y que la verdadera victoria es la victoria sobre uno mismo no frente a otro ser humano. Al igual que los cuatro principios de la unificación de cuerpo y mente, éstos no sólo se aplican durante la practica del Aikido, sino en la vida diaria.

     El Seidokan es una progresión natural del Aikido del Maestro Ueshiba. O´Sensei siempre buscaba la "verdad interna del Budo" (el camino del guerrero), y nunca se dio por satisfecho, incluso después de haber estudiado diferentes Artes Marciales. Finalmente, llegó a la conclusión de que el "Aiki", la unificación total con la naturaleza, era la verdadera respuesta a su búsqueda del "Budo auténtico",

Revista "Cinturón Negro"

La búsqueda de la Unidad...

Por Kisshomaru Ueshiba

     Yo emprendí el entrenamiento de mi cuerpo a través del Budo, y cuando realicé su esencia última obtuve una verdad aún mayor. Cuando llegué al fondo de la realidad universal vi claramente que los seres humanos deben unificar la mente, el cuerpo y el ki que los conecta a ambos, y que la persona debe armonizar su actividad con la actividad de todas las cosas del Universo. A través de la sutil actividad del Ki se armonizan la mente y el cuerpo y la relación entre el individuo y el Universo.

     Si no se utiliza debidamente la actividad sutil del Ki, la mente y el cuerpo de la persona enfermarán, el mundo se volverá caótico y el Universo entero se sumirá en el desorden. El Aikido es la vía de la verdad. Entrenarse en Aikido es entrenarse en la verdad. A través de la dedicación, del entrenamiento y de la perspicacia nacerá la actuación divina.

     Sólo si se practican los tres tipos siguientes de entrenamiento, la inamovible verdad de diamantina dureza podrá convertirse en parte de nuestra mente y de nuestro cuerpo.
     1. Entrenarse para armonizar nuestra mente con la actividad de todas las cosas en el Universo.

     2. Entrenarse para armonizar nuestro cuerpo con la actividad de todas las cosas en el Universo.

     3. Entrenarse para hacer que el Ki que conecta la mente y el cuerpo se armonice con todas las cosas en el Universo.

     El verdadero alumno de Aikido es aquel que practica y lleva a cabo estos tres puntos simultáneamente, no de una manera simplemente teórica, sino de forma efectiva, en el Dojo, y en todo momento en la vida diaria.

     El Maestro Ueshiba enseñó repetidamente:
     "Cualquier técnica de un Arte Marcial debe estar de acuerdo con la verdad del Universo. Si no lo está, el Arte Marcial estará aislado e irá en contra de la concepción del Arte Marcial como creador del amor, o Take-Musu (literalmente, marcial-creativo). El Aikido es Take-Musu por excelencia. Marcial (Take) aquí quiere decir el rugido heroico, la resonancia del cuerpo, el poder de Aum que resuena en el Universo.

     La resonancia del cuerpo se deriva de la unidad de la mente y el cuerpo, que armoniza con la resonancia del Universo. La respuesta e intercambio mutuos producen el Ki de Aiki. La esencia del Aikido es el eco mutuo de la resonancia del cuerpo y la resonancia del Universo. De esto nacen calor, luz y poder unidos en un espíritu plenamente realizado. La vitalidad del eco del cuerpo y la resonancia del Universo nutren el funcionamiento sutil del Ki y engendran a Take-Musu Aiki, el Arte Marcial que es amor que no es otra cosa que Arte Marcial".

     La contestación a la pregunta de cómo alcanzar uno, la unidad del Ki del Universo con el propio Ki, su armonioso funcionamiento y su mutua réplica está en el entrenamiento y en la práctica intensiva. Esto hace del amor y la armonía el fundamento del Aikido. El Fundador consideraba que ésta era la esencia última y su verdad más elevada.

     Este enfoque filosófico puede ir más allá de la comprensión del practicante corriente, por lo que podría buscar un ejemplo más práctico de la esencia y su manifestación como conjunto de movimientos y de técnica. De hecho, y por eso, al Fundador no le gustaba enseñar con palabras y prefería que cada persona lo comprendiera a través de la práctica y del entrenamiento, como se expresa en este poema:

     "Aiki no puede ser gastado en palabras escritas o habladas. Sin entretenerse en conversaciones inútiles, comprended a través de la práctica".

     Esto es idéntico al hecho de la imposibilidad de conocer el secreto de la espada japonesa mediante el análisis. Sólo puede adquirirse su conocimiento de forma personal y a través de la experiencia real. Todos los asuntos relacionados con el corazón y el espíritu humano son de esta naturaleza.

     Cuando el Maestro Ueshiba explicaba la esencia y la verdad del Aikido en términos más prácticos, lo hacía usualmente por medio de la poesía o de charlas ocasionales a sus discípulos, de las cuales escribió un número nada desdeñable. Pero, puesto que cada una refleja sólo un aspecto de su filosofía, pueden exponerse a interpretaciones erróneas y, por tanto, deben de tratarse con cuidado.

"El Espíritu del Aikido..."


martes, 9 de abril de 2013

CURSOS ABRIL 2013


     Estos son los cursos que la AETAIKI va a celebrar durante este mes de Abril:

13-14 Santander,- Roberto Sänchez, 5º Dan.

13-14 León,-        Ricardo Ledesma, 6º Dan

20       Ferrol,-      Octavio de la Mata, 5º Dan
                             Angel Luis Martinez, 5º Dan

27-28 Madrid,-     CURSO DE ALTO NIVEL
                             Claude Pellerin, 7º Dan
                             Gilbert Milliat, 7º Dan

     Si  duda todos ellos de altísimo nivel...