Los pasados días 26 - 27 de Octubre asistí junto a uno de mis alumnos al curso que el Maestro Claude Pellerin, 7º Dan, impartía en el Polideportivo Gallur en Madrid. Él era la primera vez que participaba a un curso del Maestro Pellerin, y yo que soy bastante pesado para esas cosas, me tiré todo el viaje contando las bondades del Maestro.
Así que nos pusímos manos a la obra, el curso transcurrió como era de esperar... el Maestro con una técnica depurada, haciéndolo todo facilísimo ¡para la desesperación de algunos, entre los cuales me incluyo!, los compañeros colaborando y ayudando, como siempre, es una costumbre en este Arte Marcial, a diferencia de otros. Yo miraba al alumno y veía como llevando poco tiémpo de práctica se estaba "viniendo arriba" y le estaban saliendo las técnicas como nunca antes en el dojo (ahí también se ve la diferencia entre un Maestro y el maestrillo, jejejeje) en ese mismo momento me dí cuenta de la importancia que tiene la asistencia a este tipo de cursos. El trabajar con compañeros de otros sitios, cada uno con una forma de entender el Aikido.
Al terminar el curso estaba contentísmo, no menos que yo claro, se había sentido integrado dentro del grupo y había trabajado con gente que lleva muchos años en esto del Aikido como uno más. Así que todo positivo... el Maestro perfecto, la organización estupenda, los compañeros igual, el alumno encantado... todos felices.
Recomendar a la gente, siempre que se pueda, intentar asistir a alguno de los cursos para poder practicar con compañeros que no sean solamente los de los centros donde habitualmente entrenamos, es bastante enriquecedor.
Agradecer a todos el trato recibido y seguramente pronto nos volvamos a ver...
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